sábado, 23 de octubre de 2010

Discos Chingones: Kumuiuta

Repentinamente el inche Guamu recordó que tiene regado por ahí otro blog, así que por fin volvió a postear sobre los discos chingones.

En esta ocasión saco mi lado más snob a la vez que exhibo mi mal uso y poco conocimiento del japonés al tratar de explicar porque "Kumuiuta" de Cocco es algo que vale la pena escuchar.

De regreso a casa (de mi amá)

Hace buen rato que no duermo sin compañía en mi antigüo cuarto. Y aunque seguido vengo para acá, no me había puesto a analizar todo el montón de porquerías que he acumulado a través de los años y que aún no me llevo a mi nueva casa. 

Reinicia la operación hormiga.


P.D.¿Por qué chingados mi regreso triunfal a la cama que no me causa dolor de espalda tenía que verse manchado por unos Pxndx wannabe's a tres casas?

lunes, 18 de octubre de 2010

Adios pollo

Tengo rato haciéndome pendejo con este post, y es porque no soy muy bueno para expresarme en cosas que realmente me importan.

Hace poco más de un mes murió Iván, un compañero de la prepa. 

Por ai' de la carrera él se fue con su familia a vivir a Ensenada y yo me quedé enclaustrado en Obregón,  a partir de entonces probablemente lo ví unas 10 veces en la última década y sin embargo lo consideré un amigo cercano, mucho más cercano que otra gente que veo casi a diario.

La amistad con él, ni siquiera surgió de forma personal, sino que nos conocimos sólo  porque formamos parte del círculo de güeyes del CBTIS que nos juntabamos principalmente a gastar dinero en las maquinitas, jugar fútbol a mediodía o prestarnos aficiones como anime, dibujos o alguna otra chingadera similar.

Salimos de la prepa y entramos a universidades diferentes, por lo que nos empezamos a juntar sólo en los cada vez menos frecuentes, juegos de futbol de fin de semana. A lo mejor nos hubieramos distanciado si no hubiera sido porque cuando a mi apá le dió su infarto cerebral, el suyo se puso muy enfermo y murió. Por la coincidencia de dolencias nuestras madres se hicieron vecinas de hospital y aunque no recuerdo que alguna vez hablaramos al respecto, había una especie de conciencia que nos etiquetaba como compañeros de desgracia.

La última vez que me comuniqué con él fue por messenger y tenía una foto tomada en la noche de mi boda como avatar. En su celular me tenía registrado simplemente como "paco", a pesar de que no le hablaba muy seguido que digamos, ni a que hay pinchemil güeyes que se llaman igual que yo. 

La religión convence a mucha gente con un sólo argumento: únete y en la vida después de esta estarás mejor. Yo no soy creyente, pero recuerdo que él si. Y si hay algo que deseo es que se encuentre en ese cielo al que tanto quiso llegar.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Inches bancos enfadosos

Pues me había estado haciendo pendejo con respecto al blog, pero cuando el Sr. Burócrata empieza a postear con más frecuencia que yo, eso ya es demasiado, así que aquí les comparto una pequeña anécdota sin moraleja y no muy interesante, pero pos es lo que hay.

Resulta que me hablan de un "número privado" al único telefono que tengo, el cual es propiedad de la chamba. La señorita (supongo por costumbre), me avisa con su voz híperactiva que gracias a que soy un excelente cliente de su banco (güey que debe y debe y sigue ahí, supongo también), me he ganado el derecho a una gran oferta.

No es ninguna novedad ese pinche script de todas las empresas que ofrecen tarjetas de crédito donde te ofrecen alguna chingadera y si mal te apendejas y contestas "si" a alguna pregunta por ahí, te encasquetan un cobro mensual de algún servicio que ni pediste, ni usas y es todo un rollo cancelar.

El punto es que desde que escuché algo así como "le damos la bienvenida al selecto grupo de...", cambié mi modo de operación a "no contesto ni madre". sí que cuando me dijo que le confirmara mi birthday la mandé a la fregada lo más educadamente posible y me contestó con un choro de los beneficios y la oportunidad única, etc. que me perdía y volvió a solicitar mis datos. Todo esto, por supuesto es parte del script para cuando encuentran un primer nivel de resistencia (ELSE {GOTO Inicio?}).

En ese punto lo más fácil para deshacerse de ellos es colgar y sanseacabó, pero me faltaban como 20 minutos de caminata y pos soy de esos güeyes que de pronto le da por estar averiguando pendejadas sin beneficio. ¿Cuántas vueltas tendría el script de los que llaman?

Trás la segunda negativa, cambió su choro a " mostrarme algunos otros beneficios que no había mencionado" y a solicitar nuevamente mis datos. En la tercer negativa se fue por el lado sentimental  apelando a la protección que merecen mis hijos (hipotéticos) y esposa (no tan hipotética).

En la cuarta negativa regresó al primer choro y por andar jugando al "sé más que los telemarketers" casi "ingreso a los beneficiarios" porque ya no preguntó datos sino que me informaba que "comenzamos con la aplicación de los beneficios, ¿de acuerdo?". Tuve que replicar que ni madre y al parecer ese es el último nivel ya que volvió a repetir lo de un inicio. Ahí fue cuando la tuve que mandar a la chingada (educadamente por supuesto) porque ya tenía como 15 minutos hablando..

Ya sé que dije que no había moraleja, pero pos ahí les va: "No se arrieguen, manden a la fregada de inicio y no anden de mamilas como yo"