domingo, 10 de marzo de 2013

Toma tu pinche indiferencia...

Desde que la gente se enteró de que viene un mini-yo en camino la pregunta mas común ha sido la misma:
¿Y? (¿qué se siente saber que vas a ser papá?)
Y mi respuesta totalmente honesta ha sido la misma: "No sé. Nada". Y no miento, simplemente no me muero de emoción, ni ansias, ni pienso es que voy a hacer, ni nada similar.

Me asusté cuando la plebe tuvo su amenaza de aborto, me preocupa que la ataquen tan seguido los achaques y no me gusta que se ponga a hacer cosas como desvelarse porque "tiene mucho que hacer". Pero la preocupación no ha sido mayor que cuando se enfermaba (cada tres días ¬_¬) de sus dolores de cabeza permanentes.

Ya cambió toda la rutina de la casa porque la plebe ya no maneja y hay que moverla a todos lados, además de que la comida es un relajo por los tiempos, pero como decía mi apá: no hay piri.

Siempre me molesta que en el trabajo me saquen de la ciudad para hacer algo que supuestamente nadie más puede hacer, pero no creo estar más encabronado que de costumbre por estar como pendejo en el D.F. porque los compañeros "no pueden" con algo. O quién sabe, a diferencia de ocasiones anteriores no tengo ni ganas de pelearme con mi jefe.


El punto es que la semana pasada me dí cuenta de que estoy teniendo algunas compulsiones post conocimiento del embarazo. Desde octubre que me enteré de la noticia hasta la semana pasada he comprado 13 juegos físicos...
... y 27 juegos descargables.
Mientras que en los 10 años anteriores compré alrededor de 40 juegos.

O sea 10 años == últimos 5 meses.

Para no sentir nada ando desperdiciado el dinero muy a gusto. ¬_¬